Los municipios rurales de España experimentan año tras año una disminución en su población. Debido a ello, estas zonas padecen una serie de problemas estructurales: baja natalidad, malas conexiones de transporte, pocas oportunidades laborales y escasos servicios sociales adecuados. Esta situación demuestra la necesidad de establecer medidas para fijar la población al medio rural a través de políticas agrarias y favorecer la incorporación de jóvenes agricultores y mujeres al sector agrario.
Por ello, uno de los objetivos principales de las políticas agrarias, tanto españolas como europeas, es crear iniciativas que favorezcan a los jóvenes en el medio rural. La incorporación de jóvenes agricultores mejorará las condiciones de vida y de trabajo, y permitirá la revitalización del medio rural y del sector agrario. Otro de los propósitos de estas políticas es reforzar el papel de la mujer rural, ya que representan un porcentaje bastante inferior al de los hombres en el sector agrario, y son esenciales para el equilibrio y la dinamización del medio rural.
A través de diferentes medidas de modernización y diversificación rural, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación «pretende atenuar el marcado proceso de envejecimiento y despoblación que viven las zonas rurales de España, con los riesgos socioeconómicos y culturales que esto conlleva».
Estrategia de Modernización y Diversificación Rural
Las mujeres y los jóvenes son el eje de esta estrategia, que diseña una serie de medidas claves para el mantenimiento del medio rural y de la actividad agroalimentaria. El objetivo cuantificable de la misma es incorporar jóvenes agricultores a la actividad agroalimentaria y forestal. Además, conseguir que un gran porcentaje de esos jóvenes sean mujeres.
Medidas para la incorporación de jóvenes agricultores y mujeres al medio rural
1. Definición de joven agricultor
El joven agricultor es aquella persona que, en el momento de presentar la solicitud no tiene más de 40 años, cuenta con la capacitación profesional agraria, la competencia profesional adecuada y se establece en una explotación agraria por primera vez como titular de la explotación.
Reglamento (UE) 1305/1013 del Parlamento Europeo
2. Formación exigida para solicitar las ayudas de primera instalación
Para las políticas agrarias, la formación constituye una gran oportunidad para los jóvenes, ya que una mayor cualificación de los profesionales del sector contribuye a incrementar la rentabilidad y competitividad de las explotaciones, así como a una mejora de su sostenibilidad.
Cada Comunidad Autónoma ha establecido los requisitos de formación necesarios para acceder a los planes de ayudas para jóvenes agricultores. Con ello pretenden que las nuevas generaciones de agricultores estén formados y familiarizados con las nuevas tecnologías agrarias para aumentar la productividad y la competencia ante los mercados mundiales.
Opciones de formación para acceder a las ayudas de jóvenes agricultores
- Poseer una titulación académica de la rama agraria, como mínimo, de FP o grado medio.
- Realizar el curso de Incorporación a la Empresa agraria reconocido por la Comunidad Autónoma donde se va a realizar la primera instalación de los jóvenes agricultores.
- Justificar haber trabajado por cuenta ajena en la actividad agraria durante 5 años. Esta opción solo está disponible en algunas Comunidades Autónomas.
3. Simplificar otros requisitos de acceso a las subvenciones para jóvenes agricultores y mujeres en el medio rural
Para cumplir con los requisitos, los jóvenes deben estar instalados/as por primera vez en una explotación agraria. Esta instalación debe realizarse como responsables. O, en cualquier caso, haberse instalado en la explotación en los cinco años naturales anteriores a la primera presentación de la solicitud.
Además, junto a la solicitud de las subvenciones, los jóvenes agricultores deben elaborar un plan de empresa que refleje el grado de viabilidad económica de la explotación agraria. En él, los jóvenes agricultores redactarán una descripción de la situación inicial de la explotación, una descripción de su propia situación, además de información financiera y gastos previstos para iniciar el proceso de instalación.
4. Exención del peaje en la obtención de derechos de pago básico
Las ayudas a la renta de los agricultores procedentes de la PAC se integran en el Régimen del Pago Básico. Para poder acceder a estas ayudas, el agricultor deberá disponer de “derechos de pago básico” (DBP). Estos derechos pueden cederse entre agricultores, con la limitación de poder ser utilizados únicamente en la misma región. Por lo tanto, los agricultores que inicien la actividad necesitan adquirir DPB, que pueden proceder de la Reserva Nacional o de otros agricultores.
Por otro lado, en este período existe un peaje del 20% del valor del derecho cedido, en el caso de las cesiones de derechos sin tierras, cuyo importe pasa a favor de la Reserva Nacional. El pago de este peaje implica un esfuerzo económico mayor a la hora de iniciar la actividad. Por este motivo, para favorecer la adquisición de estos derechos en todo tipo de cesiones de derechos en los que el cesionario sea un joven agricultor, se eliminará el peaje de los derechos, para fomentar la accesibilidad a DPB de mayor valor, aumentar su ayuda a la renta y facilitar su instalación.
Más información sobre todas las medidas establecidas por la Estrategia
Estrategia de Modernización y Diversificación Rural 
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